En el post anterior publiqué una infografía elaborada por OnlineUniversities.com que habla sobre el estado del e-book en Estados Unidos: quiénes, cómo, dónde y cuánto timpo lo usan; en ese mismo post mencionaba que hacen falta estudios e infografías similares, pero que hablen de México y nos den una luz sobre lo que está pasando con la industria del libro electrónico.
Desafortunadamente, la nuestra aunque ha tenido algunos intentos que no se pueden menospreciar y de los que ya hablé en el post Panorama actual del e-book en México –El Fondo de Cultura Económica, Librerías Gandhi y la UNAM–, es una industria en pañales que parece no querer o no saber cómo despegar cuando de libros electrónicos se trata. No nos extrañe que los datos o estudios sobre el libro electrónico en México sean inexistentes, cuando incluso encuestas sobre la lectura en nuestro país son obsoletas (recordemos que la Encuesta más “reciente” data del año 2005).
En fin, que en esta materia debemos agarrarnos de lo que hay, que es poco, y tratar de comenzar a entender lo que está pasando en nuestro país con la lectura en pantalla. Así que el día de hoy la CANIEM (Cámara Nacional de la Industria Editorial Mexicana) en su cuenta de twitter mencionaba el Reporte de Descargas Digitales en México 2011 elaborado entre octubre y noviembre de 2011 por IPSOS Media CT para la Coalición por el Acceso Legal a la Cultura A.C., donde se habla un poco del e-book. Veamos lo que nos dice este reporte:
- Se elaboraron 1000 entrevistas a 1811 contactos entre los 12 y 44 años, de los cuales el 57% reportó haber tenido acceso a internet principalmente en sus casas.
- Las principales actividades realizadas en internet son: chatear 69%, redes sociales 68%, descargar música 62%, buscar información 37%, juegos 21%, etc.
- Muy por debajo de la lista de actividades realizadas en internet, encontramos las relacionadas con la lectura: el 10% informó que utiliza internet para leer diarios, 8% lee revistas, 8% lee libros electrónicos y otro 8% los descarga.
- Los datos obtenidos para el periodo de 2010 son ligeramente distintas en comparación con los datos correspondientes a 2011: leer periódicos 3%, leer revistas 1%, leer libros electrónicos 8% (sin cambio) y descargar libros 11% (el porcentaje bajó en 2011).
- Un tema al que debemos prestar atención es el de las descargas: 86% de las descargas de libros electrónicos se realizaron de manera ilegal y cuando se les preguntó el motivo, 38% respondió que eran contenidos de uso personal, seguido del 23% que respondió que es algo práctico. De las personas que descargaron contenidos de forma ilegal (incluidos los libros electrónicos) 51% son hombres y 49% mujeres la mayoría de ellos entre los 12 y los 26 años de edad (72%).
- Los libros más descargados son, en primer lugar Crepúsculo y en el lugar 15 se encuentran los libros de la saga de Harry Potter.
¿Qué nos indica este comportamiento?
Me sorprendió mucho que la principal respuesta para descargar contenidos ilegales porque eran para uso personal, cuando esperaba que se debiera a la falta de oferta de contenidos; sin embargo, deberíamos analizar que el usuario no busca lucrar y si el siguiente motivo es la practicidad de descargarlos, entonces sí podemos estar hablando de una escasa oferta como problema de fondo.
Por otro lado, aunque la lectura tanto de libros y revistas, como de libros electrónicos es baja en comparación con otras actividades realizadas en internet, las editoriales no deberían perder de vista esto y verlo como una oportunidad, sin duda en los próximos meses esta actividad puede registrar un incremento significativo.
