En una época donde todo parece ser información, información, información, a veces cuesta mucho trabajo mantener el ritmo a los cientos de artículos, noticias y los posts que diario aparecen en los blogs que seguimos, si a eso agregamos lo que nos llega vía Twitter y Facebook, la sobrecarga se vuelve más y más pesada.
En el camino tenemos algunas aplicaciones útiles para guardar lo que más nos interesa para una lectura posterior, como es el caso de Instapaper, Pocket, el Reading List de Safari o incluso aplicaciones y extensiones web que nos permiten convertir y guardar artículos para lecturas posteriores; sin embargo, debemos reconocer que a veces no nos es posible volver a estos artículos y es mejor leerlos en el momento.
¿Como hacerlo sin volvernos locos y sin convertirnos en unos obesos informacionales?
Desde luego, lo más importante es y será aprender a filtrar y priorizar contenidos y entender que en los tiempos que corren no se puede guardar todo, ni leer todo, tal como ocurre en las bibliotecas tradicionales donde es imposible leer cada libro del acervo.
Sin embargo, hay quienes afirman que en la lectura de rapidez encontramos un buen método para leer más en menos tiempo, ya saben, me refiero a aquello de leer determinado número de palabras por minuto.
Aunque nunca me ha encantado eso de la lectura de rapidez y tengo algunos “peros” en cuanto a la compresión lectora vía este método, hoy encontré vía el blog eBookNewser, una aplicación para iPad que no deja de ser interesante para probar a leer más, se trata de ReadQuick.
ReadQuick Speed Reading iOS Application from Wondersauce on Vimeo.
ReadQuick tiene un costo de MX$48.00, te permite buscar artículos en la web y al añadirlos a la aplicación, ésta lo desplegará palabra por palabra al ritmo que el usuario decida y que varía entre las 50 y las 800 palabras por minuto, de esta manera proporciona al lector un tiempo promedio de lectura dependiendo del ritmo seleccionado. ReadQuick te proporciona también estadísticas del progreso en tu velocidad de lectura y, por si fuera poco, el asunto se puede hacer más social con la opción de compartirlo vía Twitter, Facebook o correo electrónico. Además, también se pueden enviar los artículos a Instapaper para leerlos offline.
En el video aseguran que con esta aplicación el usuario no sólo leerá más, sino también aprenderá más. Yo me mantengo fiel a mi premisa de que la lectura de rapidez no es lo deseado; sin embargo, ya probé con algunos artículos y, no voy a negar que resulta muy entretenido y también retador seguir el ritmo; además las estadísticas también llegan a ser interesantes. Y por no dejar, cierro este artículo con esta cita sobre la lectura de rapidez:
Hice un curso de lectura rápida y fui capaz de leerme La guerra y la paz en veinte minutos. Creo que decía algo sobre Rusia.
Woody Allen
