Booktubers: ¿la farándula de la lectura?

booktubers

Hace algún tiempo escribí un artículo (muy entusiasta, ahora que lo reviso con los ojos de la distancia que ha visto toda la faramalla alrededor del tema) sobre los booktubers y la forma en cómo se está diversificando y socializando la lectura en pantalla. A estas alturas sería necio negar la importancia de este grupo de jóvenes que se dan a la tarea de videoreseñar sus libros y colgarlos en sus canales de Youtube.

Los booktubers y sus reseñan han probado ser un modelo de negocio harto exitoso para estos chicos y, en especial, para las editoriales: cientos de miles (millones en algunos casos) de likes y seguidores, libros vendidos y libros publicados.

A pesar del innegable éxito de los booktubers, considero que es imprescindible tomar distancia y analizar con un ojo más crítico las distintas aristas de un movimiento que nació como un grupo de jóvenes con reseñas honestas y poco a poco se ha ido convirtiendo en una especie de farándula de la lectura. Esta distancia y este ojo crítico cuando muchos de los artículos sobre el tema son en exceso optimistas y a veces faltos de conocimiento sobre el mundo del libro, para muestra el artículo Booktubers o por qué tus hijos leen más que nunca.

Y que quede constancia que no estoy rechazando ni abrazando al 100% a los booktubers, lo considero un movimiento importante para las distintas formas en las que se lee actualmente, pero siempre quedarán algunas interrogantes y aristas sobre su labor.

Booktubers: ¿la farándula de la lectura?

Los booktubers son una especie de rockstars de la lectura que atraen a cientos de miles, y en algunos casos millones, de jóvenes (lectores o no) que se vuelcan a ver sus reseñas y adquirir el libro en turno, y cuando hacen presentaciones en vivo no dudo que más de un escritor quisiera reunir todo ese público. De hecho, de acuerdo con el artículo antes citado “Los datos de Amazon aseguran que una crítica positiva de un booktuber pueden llegar a aumentar el 20% de las ventas de un libro.” Pero, ¿esto implica necesariamente que se esté leyendo lo que recomiendan?

Las editoriales, por su parte, no han perdido de vista la oportunidad que representa el booktuber para llegar a otros “lectores”, por ello cada vez es más común encontrar que los booktubers más famosos terminan publicando un libro, aunque en muchas ocasiones la premura de la publicación da como resultado una edición plagada de errores y cuyo contenido deja mucho que desear. Para muestra, acá un video donde Raiza Revelles y Sebas Arango hablan de todos los problemas que tuvo Zelic, su opera prima, y en el que queda en evidencia la vorágine alrededor del booktuber-escritor-editorial.

A diferencia de autores que decidieron autopublicarse y cuyo éxito ha sido tal que les ha valido llegar a oídos de las editoriales que terminan por publicarlos en el esquema tradicional, son historias ya probadas (algunas con mejor contenido que otras, nadie lo va a negar, que tampoco todo en la autoedición son miel sobre hojuelas); los booktubers, por otro lado, llegaron reseñando y la fama que han ganado en el mundillo de las reseñas les abre las puertas para ser autores, que será publicado con las ya mencionadas carencias e incluso en varias ocasiones sin que el booktuber tenga la oportunidad de revisar su propio escrito.

En ambos casos las editoriales están publicando con base en la popularidad más que en el contenido, pero el autor independiente alcanzó popularidad con una historia que ya ha sido aceptada por los lectores, cosa que no ocurre en el caso de los booktubers.

Repito, no se puede negar la importancia de lo que están haciendo estos jóvenes y mucho menos rechazar su labor, de hecho, hay algunos (pocos en realidad) canales que destacan por la calidad de las reseñas y tampoco dudo que haya lectores que se iniciaron siguiendo alguno de estos canales; sin embargo, asegurar que es gracias al booktuber que toda una generación está leyendo más me parece un tanto desmedido.

En realidad creo que las tecnologías ha abierto un abanico de posibilidades lectoras y no tengo duda de que se está leyendo más que nunca (recordemos aquello de hay lecturaS y hay lectoreS), pero no estoy tan segura de que el movimiento booktube sea exclusivamente el responsable de aumentar las filas de lectores jóvenes.

* Imagen vía: Diccionario de Booktubers

Deja un comentario