Audiolibros para niños

Audiolibros para niños

Como lo hemos visto desde hace ya varios años, el audiolibro está viviendo un momento insuperable de crecimiento y auge; sin ir más lejos, este 2022 ha sido un año en el que el audiolibro ha reportado crecimiento tanto en producción como en ventas,  lo anterior de acuerdo con reportes como el de Bookwire, por mencionar sólo uno de ellos.  Sin embargo, aún son pocas las opciones de audiolibros para niños. Cosa extraña pues la narración oral, al igual que el audiolibro, no se detiene y las y los niños son los principales destinatarios. 

Si bien es cierto que, como se menciona en DosDoce.com, el consumo de contenidos para niñas y niños será el de mayor demanda y comienza a existir una mayor oferta, convendría preguntarnos por qué aún no existe un interés sólido de las editoriales por llevar más contenidos en audio para niñas y niños. 

En el mercado existen algunos ejemplos interesantes como los dos que menciono a continuación:

  • Piboco, una app de la que ya les hablé anteriormente, lleva el libro álbum enriquecido con audio y animación a las pantallas. Lo interesante de Piboco no es que intente crear contenido desde cero, sino que parten de una cuidadosa curaduría de libros álbum que han sido galardonados con algún premio editorial, una vez seleccionados los enriquecen con narración, música y animación. Los libros están disponibles en inglés, francés, español, italiano, alemán y danés. Y como ya lo he mencionado en otras ocasiones, es una de las propuestas más interesantes de libro álbum llevada a la pantalla, que además tiene narración. Entre las editoriales mexicanas que participan con Piboco está Alboroto Ediciones que obtuvo el Premio a la Mejor Editorial Infantil del Año de la Feria del Libro de Bolonia en 2020.
  • Cuentásticos es un podcast en español de muy reciente creación (sólo cuentan con una teporada de10 episodios) dirigido a un público entre los cuatro y los doce años. Ya está abierta su convocatoria para la segunda temporada en la que las y los niños de entre 4 y 12 años podrán enviar sus historias que después de una cuidadosa selección, serán publicados en el podcast. Me surge la duda sobre cómo esperan que un niño de cuatro, cinco o seis años envíen una historia escrita. Lo que encuentro interesante de este podcast es contenido original creado por niñas y niños, además de que la producción es de calidad. 

A pesar de los ejemplos anteriores, considero que la mayoría de las propuestas de audiolibros para niños, o contenidos literarios en audio para niños, se enfocan más en lo didáctico que en lo literario o, equivocadamente se piensa que el contenido literario infantil debe tener por fuerza alguna enseñanza o moraleja, lo que hace que resulten “moralinos”, con lenguaje condescendiente y, desde luego, poco interesantes para el público objetivo. 

Por ello, insisto en que es necesario que las editoriales de literatura infantil y juvenil presenten propuestas sólidas y atractivas para las y los niños. 

Audiolibros para niños

En México algunas editoriales comienzan a publicar audiolibros para niños, como es el caso de El Naranjo, que además fue de las primeras editoriales que publicó libros electrónicos enriquecidos y que, por otro lado, se destacó durante la pandemia al permitir el acceso gratuito a sus audiolibros a través de Audible.  

Existen también otras editoriales de Literatura Infantil y Juvenil que comienzan a ofrecer en las distintas plataformas audiolibros en español, ya sea produciendo directamente o permitiendo a las plataformas producir los audiolibros. Entre ellas encontramos a SM (cuya versión en audiolibro de Los rojos camaradas de Ana Romero es hermosa), Fondo de Cultura Económica, Océano, Montena, Penguin Random House (la que por cierto, este año obtuvo el Audie Award en la categoría “Mejor audiolibro en lengua española” con el audiolibro ¡Primera caída! El enmascarado de Terciopelo, escrito por Diego Mejía)

Como podemos ver, el terreno no es completamente árido y existen ejemplos de calidad de audiolibros para niños; sin embargo, aún falta que las editoriales de literatura infantil y juvenil exploren y exploten más el formato que, como ya lo mencionamos, seguirá creciendo y haciéndose de más lectores. 

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